jueves, 14 de junio de 2012

"Perrito llanero mexicano"






imagen de Perrito llanero mexicano (Cynomys mexicanus) Animales en Extincion
El perrito de la pradera mexicano o perrito llanero mexicano (Cynomys mexicanus) no es realmente un perrito, si no un roedor endémico de México que se encuentra en peligro de extinción. Además la IUCN lo considera muy raro y con una tendencia de la población desconocida.

Está en peligro ya que quedan perritos llaneros en un área total menor de 600 km2; además este área está altamente fragmentada y por si no fuera poco, está perdiendo terreno, extensión y calidad de hábitat a una velocidad muy alta. Como consecuencia el número de localizaciones y subpoblaciones está disminuyendo también.


CARACTERÍSTICAS

El nombre de perritos les viene por el sonido que emiten, similar al de un ladrido; este ladrido lo emiten cuando se sienten amenazados o cuando toman contacto con otros individuos.

Son animales diurnos que construyen madrigueras para vivir y protegerse de los depredadores. Las madrigueras son túneles que excavan y que se conectan unos con otros. Llegan a ser hasta de 6 metros de largo y 2 metros de profundidad.

Tienen una gran organización social y forman colonias (llamadas ciudades) con pequeñas unidades familiares que pueden llegar a abarcar más de 100 hectáreas. Una familia incluye a un macho adulto, 2 o 3 hembras, algunos jóvenes y pequeños.

Son animales muy sociales que durante el día suelen permanecer a las entradas de sus madrigueras o en los alrededores aseándose unos a otros y vigilando y defendiendo los límites de su territorio. Para unir lazos entre los individuos de la colonia realizan acciones como son la del reconocimiento anal, el aseo mutuo, la alimentación y los contactos bucales. Un comportamiento curioso de los perritos llaneros es el del ´beso´, que consiste en el contacto de la boca abierta de un individuo (lo que hace que los incisivos sean visibles) con la del otro y puede funcionar tanto como señal de amenaza como de reconocimiento.

Son pequeños y de aspecto fácilmente reconocible ya que miden entre 28 y 33 cm. Alcanza hasta 1 o 1,5 kg.

Su color varía entre el pardo amarillento y pardo rojizo, salpicado con algunos pelos negros; el vientre es más claro y la parte terminal de la cola es negra.

Son omnívoros ya que se alimentan sobretodo de pastos, semillas, hojas, tallos y raíces, pero durante el verano también comen chapulines y otros insectos. Al vivir en zonas con poco agua adquieren la mayoría del agua de las plantas.

La actividad de miles de individuos en las zonas donde habitan impide que las hierbas altas se regeneren, dando lugar a otras hierbas anuales más pequeñas y de crecimiento rápido. Éstas constituyen el alimento de los perritos y, además, permiten la visibilidad necesaria para advertir la presencia de posibles enemigos.

Además este mamífero está considerado como especie ecológicamente clave, ya que influyen en el medioambiente y por tanto son necesarios ya que al podar constantemente los pastos, cambian la composición de la vegetación y mejoran sus cualidades nutritivas, lo que beneficia también a los demás animales que pastan en estos lugares. Por lo tanto podemos decir que incrementan la heterogeneidad ambiental e inciden en la diversidad biológica.
Hay numerosos estudios acerca de la influencia del perrito llanero en la estrucutra de la vegetación:
Pérez Romero Luis, Guzmán Núñez Juan Antonio, Hernández Javalera Iliana Isabel y López González Juan José; Ecología de colonias de perrito llanero (Cynomys mexicanus) con diferente historial de colonización.

Durante la época reproductora es frecuente el movimiento de individuos de un territorio a otro; tras la gestación que dura de 27 a 33 días nacen las crías entre abril y mayo en la madriguera. Las crías al nacer tienen los ojos cerrados y carecen de pelo. Pueden tener entre dos y diez crías aunque lo normal son 4.

Viven de 4 a 7 años.

Pueden sentarse sobre sus cuartos traseros, manteniéndose rectos. Esta posición la toman para vigilar, comer o relacionarse. En cambio para andar usan las cuatro patas.

Entre sus predadores están los coyotes, el lince rojo, águilas, halcones, tejones y comadrejas.


HÁBITAT Y ÁREA DE DISTRIBUCIÓN

Este encantador roedor es uno de los perritos de la pradera correspondiente a este género nativo de América del Norte. Está relacionado con las ardillas, tamias y marmotas.

Esta especie en concreto es endémica del norte y centro de México, ya que sólo se le encuentra en los estados Coahuila y San Luis Potosí. En otros tiempos también estaba en los estados de Nuevo León y Zacatecas. También pueden haber en el Desierto Chihuahuense.

Los perros llaneros se encuentran estrechamente asociados a zonas semiáridas con praderas y pastizales, caracterizados por matorrales xerófitos (adaptadas a ambientes secos), pastos y plantas rasantes.

Las praderas donde viven no son húmedas, ya que la precipitación aproximada anual está entre 250 y los 750 mm. Además tienen un alto índice de evaporación y sequías anuales y estacionales.

Habitan en altitudes de los 1600 a los 2200 metros


AMENAZAS

Está perdiendo hábitat debido a la expansión de la agricultura y las ganaderías. De hecho, para deshacerse de estos roedores han llegado a exterminarse colonias enteras mediante veneno. Y es que a pesar del papel clave que tienen los perros llaneros en los pastizales, han sido víctimas de campañas de exterminio (no solo con veneno, sino también con trampas y mediante la caza). Al inicio del siglo XX ocupaban de 40 a 100 millones de hectáreas de los pastizales de América del Norte, pero como se consideraba que eran competidores del ganado por el pasto y que podían causar fracturas en las patas de las vacas por las madrigueras, comenzó una campaña de erradicación.

La situación es preocupante ya que han perdido el 65 % de su hábitat y ya se considera desaparecido de Zacatecas, estado que representaba el 10 % de su área de distribución original. San Luis de Potosí representa un 25 % de su área original amenazada por la conversión a terreno para la agricultura y por la extracción de agua que ha secado muchos suelos y pastizales.


MEDIDAS DE CONSERVACIÓN

Está en el Apéndice I del CITES.

Es necesario legislar para que se prohiba la caza de esta especie única en el mundo, así como para que no se siembren cultivos en sus hábitats.

Son necesarios esfuerzos de difusión y educación ambiental para dar a conocer su importancia, incluso la importancia que tiene su presencia dentro de los ranchos ganaderos (asegura la disponibilidad de alimento para el ganado).

Entre 2003 y 2006 se perdieron el 30 % de las colonias de perrito llanero, por lo que se tomaron nuevas medidas para la recuperación de la especie. En 2006 Pronatura Noreste firmó convenios de conservación con los ejidos Trinidad, del municipio Galeana, en Nuevo León, para que destinara 780 hectáreas para su protección, y San José del Alamito, del municipio de Saltillo, en Coahuila, para que destinara 800 hectáreas. Estos ejidos están localizados en una región de pastizales que aún cuenta con perrito llanero mexicano.

Para la protección del roedor, Pronatura impulsa la servidumbre ecológica, lo que quiere decir que compra de derechos de pastoreo y garantiza a los ejidatarios un incentivo económico durante 15 años por el hecho de destinar las tierras a la conservación. La organización indicó que además del incentivo económico financiaría la adquisición de semilla para sembrar las tierras que están fuera de la zona protegida.

miércoles, 13 de junio de 2012

"Tiburón oceánico"








 
 



imagen de Tiburón oceánico (Carcharhinus longimanus) Animales en Extincion

Tiburones oceánicos (de aleta blanca) 
 El tiburón oceánico (Carcharhinus longimanus) es un gran tiburón pelágico que actualmente se encuentra clasificado como vulnerable. Además se encuentra en ´ peligro crítico´ en las áreas del Atlántico del Oeste y del Noroeste.

Esta especie, junto con el tiburón sedoso (Carcharhinus falciformis) y el tiburón azul (Prionace glauca), a menudo ha sido descrita como una de las tres especies más abundantes de tiburones oceánicos. Observaciones recientes, sin embargo, indican que esta especie que fue común en toda su distribución es ahora sólo de vez en cuando registrada (Baum y Myers 2004, Domingo 2004)


CARACTERÍSTICAS

Es un tiburón de cuerpo más bien aplastado y robusto, lo que le da un cierto aspecto jorobado. Se diferencia por sus características aletas largas, redondeadas y de punta blanca, que los hacen inconfundibles.

Los juveniles y algunos adultos pueden carecer de la característica de que las aletas tengan las puntas blancas. Las aletas pueden ser moteadas y en los juveniles pueden tener marcas negras.

Su dorso puede ser de color bronce, café, azulado o gris, variando según la región. Ventralmente son blancos o amarillentos. Se puede divisar una marca en forma de silla de montar entre la primera y segunda aleta dorsal.

Las aletas son significativamente más largas que en las otras especies de tiburón. Su hocico es corto y redondeado y sus ojos circulares con membranas nictitantes (membranas transparentes para que el ojo no resulte dañado pero que le permite ver; en ocasiones se le llama tercer párpado).

El tiburón tiene dientes que difieren entre las mandíbulas. Los de la mandíbula inferior pueden tener una punta fina aserrada y son relativamente pequeños y triangulares (algunos parecen colmillo). Los dientes en la mandíbula superior son triangulares, pero más largos y anchos, siendo completamente serrados. Los dentículos son aplanadamente falsos y tiene entre 5-7 crestas.

Pueden llegar a medir hasta 4 m, aunque normalmente miden alrededor de 3 m. Con respecto a su peso, pueden llegar a pesar hasta 170 kg, siendo la hembra más grande que le macho.

El ejemplar más longevo conocido tenía 22 años.

A este tiburón también se le llama tiburón oceánico de puntas blancas, lamia o jaquetón de ley.

Ya que son tiburones no muy estudiados, la estructura y la dinámica de la población de esta especie son desconocidas.

Es un pez de movimientos lentos que no dejan en ningún momento de nadar, pero que puede llegar a ser muy agresivo cuando está capturando presas.

A pesar de su aislamiento de las otras especies, se le puede ver acompañado de un pez piloto (Naucrates ductor), de un pez delfín o de una rémora (familia Echeneidae). En 1988, Jeremy Stafford-Deitsch avistó a un ejemplar acompañado de un calderón tropical o ballena piloto de aleta corta (Globicephala macrorhynchus).

Estos tiburones son predadores oportunistas altamente competitivos y que se desplazan grandes distancias para buscar comida. Su alimentación consiste principalmente en cefalópodos y peces óseos (lanzones, pez remo, barracuda, jureles, lampugas, marlines, atúnes, y caballas, pez espada), aunque pueden incluir en su dieta otras presas como barbos, manta rayas, tortugas marinas, aves marinas, gasterópodos, crustáceos, carroña de mamíferos, y hasta basura arrojadas desde los barcos.

Según de lo que se vaya a alimentar puede comportarse más o menos agresivo. En el caso de un cardumen de atunes se le ha visto nadar con la boca abierta, pero con otras presas actúa más agresivamente, por ejemplo, metiéndose entre los peces y mordiendo. Además se les puede ver compitiendo por la comida con los tiburones sedosos (Carcharhinus falciformis).

Cuando los tiburones se alimentan puede tener lugar el ´frenesí alimentario´; esta es la situación en la cual los tiburones estimulados por la presencia de sangre y alimento, se muestran extremadamente violentos. Es tal la agresividad que un tiburón estimulado, puede llegar a atacar y matar a un tiburón de su misma especie."

La época de apareamiento se produce a principios del verano en todo el noroeste del Océano Atlántico y en el sudoeste del Océano Índico. En lazona de Nueva Gales del Sur los apareamientos son entre Enero y Marzo. En cambio han sido capturadas hembras en el Pacífico con embriones en su útero en otras épocas del año, sugiriendo una época de apareamiento más larga o durante todo el año en esta zona de la Tierra.

Hay tiburones vivíparos, ovovivíparos y ovíparos. En este caso son vivíparos al igual que las personas. Sin embargo su período de gestación es de 1 año, tras lo cual nacen entre 1 y 15 recién nacidos con una longitud de entre 60 y 65 cm.

La ubicación de los viveros no se conoce bien, pero se han encontrado jóvenes tiburones oceánicos a lo largo de la costa del sudeste de EE.UU., lo que sugiere la presencia de los mismos sobre la plataforma continental.

La madurez sexual se obtiene cuando los machos tienen 1,75 m de longitud y las hembras 2 m. (A los 4 o 5 años de edad)

El importante oceanógrafo Jacques Cousteau describió a este tiburón como ´el más peligroso de todos los tiburones´. De hecho, este tiburón está considerado como el responsable de la mayor parte de las fatalidades humanas en alta mar entre todas las otras especies, como resultado de la predación de naufragios en mar abierto o de aviones caídos al Océano.


CLASIFICACIÓN TAXONÓMICA

Este tiburón fue descrito por primera vez por el naturalista René Primevère Lesson en la 1822-1825 circunnavegación del mundo en la Corbeta Coquille. Lesson los nombró el Tiburón Squalus maou después de aprender la palabra polinésica para Tiburón. Sin embargo la descripción y el nombre de Lesson fueron olvidados.

Tiempo más tarde fue descrito por el cubano Felipe Poey (1861) como Squalus longimanus. otro nombre que se le dio fue el de Pterolamiops longimanus que ha sido usado durante toda la historia.

Actualmente está clasificado dentro del género Carcharhinus y debería de ser Carcharhinus maou ya que la primera descripción tiene prioridad, pero debido a que aquel nombre permaneció olvidado tanto tiempo, el nombre más aceptado actualmente es el de Carcharhinus longimanus)


HÁBITAT Y ÁREA DE DISTRIBUCIÓN

Es un tiburón pelágico de los mares tropicales y subtropicales.

Un pez pelágico es el que vive en mar abierto (o lagos muy grandes) en las capas superficiales o entre aguas, evitando o limitando al máximo su contacto con la costa y el fondo.

En este caso en concreto este tiburón pasa la mayor parte de su tiempo en la capa superior del océano (entre los 0 y 50 m) de aguas abiertas y profundas. Si embargo, ocasionalmente se encuentran en aguas poco profundas, hasta los 37 m, principalmente alrededor de islas mesooceánicas como Hawaii, o en las áreas en las que la placa continental es delgada y hay acceso a aguas profundas cerca.

Se les encuentra entre los 30° N y los 35° S (según datos de la IUCN) en aguas con temperatura superior a 18 °C, prefiriendo aguas entre 20 y 28 °C. Sin embargo, en 2004, un oceánico de punta blanca fue encontrado muerto al Oeste de la costa de Suecia, bastante más al norte de donde se considera su límite norte.

Su distribución parece depender del tamaño y el sexo. Algunas muestras son que parece ser que se capturan individuos más granes en zonas más profundas. Además la captura de tiburones oceánicos de manera incidental demuestra que esta especie aumenta en abundancia conforme nos alejamos de la costa, no congregándose en torno a masas de tierra como en el caso de los tiburones sedosos.


AMENAZAS

Pese a que los problemas están derivados de la pesca incidental o no, las capturas, especialmente en las aguas internacionales, no están suficientemente controladas, lo que empeora la situación. Y es que el tiburón oceánico, a pesar de estar expuesto a la misma presión de pesca que otras especies pelágicas, no tiene estudios con datos suficientes sobre su disminución, por lo que es necesario realizar mayores esfuerzos para mejorar su evaluación global. De hecho, ya se están realizando esfuerzos para mejorar los datos de algunas regiones y asegurar la conservación y la gestión, que sin duda requiere de acuerdos internacionales. Algunos de los problemas son:

1 Esta es una especie muy importante comercialmente ya que sus aletas son usadas para la sopa de aleta de tiburón y su grasa es usada para obtener aceite usado con fines medicinales. También se aprovecha su carne tanto fresca, ahumada como salada y su piel como cuero. Por lo tanto está sujeto a fuerte presión debido a la pesca en toda su distribución.

2 Otro problema es el de la pesca incidental; Puede caer en palangres, redes de enmalle y de arrastre de fondo de barcos o buques que van en busca de otras especies de peces, como por ejemplo, de atunes.

Para hacernos una idea de su disminución, mientras que en el Golfo de Mexico los buques palangreros podían coger entre 2 y 25 tiburones en los años 50, por lo que su abundancia se consideraba un problema debido a elevada proporción de atunes dañados por los tiburones que los mordían. Sin embargo, los últimos documentos o no lo mencionan como especie o lo nombran como raro.

Como ya se ha mencionado. la existencia de pocos datos sobre su tasa de captura es un grave obstáculo para evaluar la situación de esta especie en regiones distintas a las ya estudiadas del Atlántico. Solo existen algunos datos ya algo antiguos; por ejemplo, en Estrasburgo (1958) estos tiburones constituían el 28 % del total de las capturas con los buques palangreros cuando salían a buscar atún. Por otro lado, según Berkeley y Campos (1988), estos tiburones constituían el 2,1% de la captura incidental de tiburones en la pesquería de pez espada a lo largo de la costa este de Florida entre 1981 y 1983. Según las estadísticas de pesca en Japón, esta especie en el Pacífico constituía el 20 - 30 % de la pesca incidental.


MEDIDAS DE CONSERVACIÓN

Aunque se sabe que antes era muy abundante, realmente hay pocos estudios de población hasta 2003. Para este año la población ya se estimaba que había descendido en un 70 % la población de los iniciales estimados en el atlántico del Oeste y del Noroeste entre 1992?2000.

En otro estudio realizado en la zona del Golfo de México usando datos de varios estudios de fauna pelágica de las Costas de Estados Unidos de mediados de la década de los 50 y observaciones de finales de la década de los 90, estimaron una declinación de nada menos que el 99,3% en este período. Sin embargo, en este estudio no se consideraron los cambios en las prácticas de pesca o en la de forma de recoger los datos, por lo que existe un fuerte debate referente a la validez estadística de éstas afirmaciones.

En definitiva la conservación y gestión se requieren con urgencia, ya que las únicas medidas de conservación actuales se basan en una cuota de una amplia variedad de especies de tiburones para las aguas Atlánticas de Estados Unidos.

En concreto, la presión pesquera sobre esta especie debe ser disminuida considerablemente a través de la reducción del esfuerzo pesquero y de los límites de captura.

Además deben aumentarse las medidas para aumentar las posibilidades de supervivencia tras la captura e implementar la aplicación a gran escala de medidas que eviten la pesca en áreas a gran escala oceánica.

Tal vez lo más importante a la hora de proteger a una especie que se mueve por muchos océanos sea el conseguir cooperación internacional. Por ello aparece como una especie altamente migratoria en virtud del Acuerdo de las Naciones Unidas relativo a las poblaciones pesqueras (UNFSA) de 1995. El Acuerdo requiere que las zonas costeras e industrias de pesca tomen medidas para asegurar las especies en peligro, pero avances bastante pobres se han dado en relación a la protección del oceánico de punta blanca.

También es de importancia el Plan de Acción Internacional para la Conservación y Ordenación de los Tiburones (PAI-Tiburones), que recomienda específicamente que las Organizaciones Regionales de Pesca (ORP) lleven a cabo evaluaciones periódicas de población de tiburones y que los Estados miembros cooperen conjuntamente en la realización de planes de ordenación regionales para los tiburones. Aunque se están tomando medidas por parte de algunos miembros para recoger datos específicos de especies de tiburones pelágicos, y para prohibir la práctica del aleteo, hasta la fecha ninguno de ellos ha limitado las capturas de tiburones o ha redactado un ´Plan tiburón´ como sugieren las directrices del PAI-Tiburones. (Según la IUCN).

martes, 12 de junio de 2012

"Manatí de las Indias"


imagen de Manatí de las Indias Occidentales (Trichechus manatus) Animales en Extincion
Manaties en su medio natural

El manatí de las Indias occidentales o vaca marina (Trichechus manatus) están catalogado como ´vulnerable´ por la IUCN y se encuentran en la lista de los animales en peligro de extinción bajo la ´Ley de los EE. UU. de 1973 para las Especies en peligro de extinción, como enmendada´, así como en otras muchas normas de protección de diferentes países.

Está catalogado como vulnerable ya que el número de adultos es de menos de 10000 ejemplares si hablamos de ambas subespecies juntas. Además se espera que disminuya la población a un ritmo de un 10 % en las próximas 3 generaciones (20 años) como resultado de la pérdida de hábitat y factores antropogénicos


POBLACIÓN

Las poblaciones de manatíes en el pasado disminuyeron principalmente por el consumo de su carne por las personas, sin tener en cuenta que son mamíferos que tienen una baja tasa reproductiva. Actualmente las poblaciones existentes están siendo afectadas, además, por actividades humanas relacionadas con el intenso desarrollo de las zonas costeras, entre otras amenazas.

Actualmente aunque los manatíes se encuentran presentes en más de 20 países, la mayoría de ellos cuentan con poblaciones de menos de 100 individuos.

En Panamá, por ejemplo, se piensa que las poblaciones de manatíes han disminuido en Panamá. Y es que aunque Panamá tiene la costa más extensa del Caribe en la América Central, su hábitat apropiado es limitado. El número total de los manatíes en el país puede que sea tan bajo como de 42 a 72 individuos (Mou Sue et al. 1990).

Se estima que en Puerto Rico la población es de unos 60 a 250 individuos.

Se considera que en Colombia la especie ha venido disminuyendo rápidamente de su área original de distribución principalmente debido a la caza (Trujillo et al. 2006).


CARACTERÍSTICAS

Del manatí de las Indias Occidentales no había mucha bibliografía ni estudios hasta hace relativamente poco, aunque parece ser que se está tomando conciencia del asunto y cada vez se encuentra más información al respecto de esta especie. En este artículo hemos querido poner información general con respecto a estos mamíferos marinos, que esperamos que sea de utilidad. Sobre las subespecies hablaremos más extensamente en otros artículos.

Antes que nada, mencionar que la primera observación registrada de manatíes en América data de 1493 en una expedición de Cristóbal Colón, aunque sin embargo, casi todo lo que se sabe de manatíes se ha aprendido en los últimos 25 años, y en mayor medida en los últimos 10 años.

Estos mamíferos marinos son miembros del Orden Sirenia, un grupo singular de mamíferos acuáticos que se alimentan de materia vegetal.

A modo de curiosidad, su nombre científico Trichechus manatus, viene del griego tri (tres) y chechus (uñas) y de la lengua indígena Caribe manati que significa con mamas.

Los manatíes son los únicos mamíferos marinos exclusivamente herbívoros. Debido a que las plantas tienen un bajo contenido energético y a que estos son tan grandes, los manatíes necesitan comer nada menos que la décima parte de su peso cada día para obtener la energía necesaria. Es decir, necesitará consumir unos 50 kg de plantas diariamente. Por consiguiente su metabolismo es muy lento; esto también repercute en que al poder enfermar en zonas con temperaturas bajas, donde les costaría mantener la temperatura idónea, necesiten vivir en aguas tropicales o subtropicales.
Consumen plantas y pastos sumergidos, flotantes o emergentes de agua dulce, sin ser muy selectivos al respecto. Aun asi, si puede ser, parece que prefieren consumir la hierba de manatí (Syringodium filiforme) y la hierba de tortuga (Thalassia testudinum).

Pueden llegar a medir hasta más de 3 m y pueden pesar una media de 500 ? 600 kg. Las hembras son más grandes que los machos. Sin embargo, se han observado individuos que miden hasta cuatro metros con un peso de hasta 1.500 kilogramos.

Al igual que el resto de mamíferos marinos respiran aire fuera del agua, por lo que suben a la superficie a tomar aire. Cuando están descansando pueden subir a tomar aire cada 20 minutos, mientras que cuando están activos necesitan tomar aire cada 3 o 5 minutos. Además, necesitan renovar de manera muy eficaz el aire de sus pulmones para tomar el máximo de aire nuevo; así pues pueden llegar a intercambiar el 90 % del aire de sus pulmones cuando salen a respirar. Cuando se sumerge, los dos orificios nasales, localizados un poco más arriba de la boca, se cierran herméticamente.

Entre ellos se comunican mediante un coro de voces que suena como rechinidos. Los sonidos que hacen pueden se escuchados por el hombre

En cuanto a sus características morfológicas, sus ojos son pequeños y sus orejas carecen de pabellón externo. Los huesos son extremadamente densos y los huesos largos y costillas carecen de cavidad para la médula. Su piel esta finamente arrugada, con cinco centímetros de espesor, cubierto generalmente por algas y pequeños moluscos. La cabeza se ensancha y se une sin cuello ni hombros.

Además su cuerpo es fusiforme, de color gris a negro, con una cola horizontalmente aplanada a modo de pala y sin miembros posteriores. Los miembros anteriores están modificados en aletas en forma de remos y presentan uñas a los extremos. Las aletas las usan para nadar, coger alimento, o incluso abrazar a otros manatíes. El hocico es chato y los carnosos labios flexibles están provistos de cerdas sensoriales

Con respecto a su boca, está adaptada para la vida herbívora. No tienen dientes frontales, solo molares. Además, como ocurre en otras especies, al desgastarse un molar frontal se mueve hacia delante, y una nueva pieza brota atrás.
Tienen un labio superior grande y partido. Los lados derecho e izquierdo pueden moverse de manera independiente para atrapar y mover a la comida a su lugar. Detrás de los labios hay unos parches llenos de bordes que resquebrajan los alimentos en piezas más pequeñas antes de que los molares los muelan finalmente.

Con fuertes movimientos hacia arriba y hacia abajo, utilizan la cola para impulsarse por el agua. Generalmente se mueven a unos 4,8 a 8 km/h, por lo que ver nadar a los manatíes, es como ver un ballet en cámara lenta, mientras se retuercen y dan volteretas silenciosamente en su hogar acuático.

Tienen una esperanza de vida de unos 70 años.

Con respecto a sus hábitos, son generalmente solitarios, aunque pueden ser vistos en pares o en pequeños grupos hasta de 13 individuos a la vez. Estas agrupaciones sin embargo, la mayoría de las veces son temporales. En algunas zonas son más duraderas

Cuando una hembra puede reproducirse se congregan varios machos a su alrededor, formando una manada reproductora. Tras la reproducción se volverán a separar. Las madres y las crías sí que mantienen contacto durante un tiempo, comunicándose con sonidos. Las crías se alimentan de la madre durante casi un año, aunque permanecerán juntos durante dos años.
Las crías de manatí al nacer pesan 30 kg y ya miden 1,20 m.

Son lentos reproductivamente hablando ya que alcanzan la madurez sexual a los 10 años, y su periodo de gestación dura un año, tras lo cual su cría permanecerá junto a ella unos dos años. Las hembras se reproducen cada 3 a 5 años.

Entre otras cosas, se sabe que ayudan a mantener libre de vegetación los canales de irrigación y de transporte, por lo que es un añadido a la importancia que pueda tener para el hombre esta especie.


HÁBITAT Y ÁREA DE DISTRIBUCIÓN

El manatí habita en aguas tropicales y subtropicales. Se distribuye por la Costa atlántica y estuarios, desde el sureste de E.E.U.U. y la costa este de América Central hasta Brasil; Indias Occidentales (Bahamas, Cuba, República Dominicana, Haití, Jamaica, Puerto Rico, y anteriormente Islas Vírgenes). Se le encuentra en aguas poco profundas

El manatí de las indias occidentales a su vez se diferencia en dos subespecies. El Estrecho de la Florida por un lado y las temperaturas frías del norte del Golfo de México por el otro, se cree que han fomentado esta diferenciación ; se identifican con base en las características osteológicas:

1. El manatí de Florida (Trichechus manatus latirostris) que habita en Florida y en el norte del Golfo de México

2. el manatí de las Antillas (Trichechus manatus manatus) que se encuentra en las costas y los ríos desde México hasta el noroeste de Suramérica incluyendo el Gran Caribe. Es la que se encuentra también en Puerto Rico.


Como hábitat usan ríos, estuarios y áreas costeras movilizándose libremente entre áreas de agua dulce, salobre y salada; sin embargo, parecen requerir el acceso a agua dulce.

Necesitan además que estas zonas cuenten con abundante vegetación acuática para alimentarse, proximidad a hondos canales para movilizarse y refugios tranquilos para su protección.

En Suriname, los manatíes habitan en pantanos semi sumergidos y las regiones de la sabana.
En Venezuela y Colombia los hábitats disponibles aumentan significativamenta durante la época lluviosa, permitiendo acceso a los tributarios y lagunas. Durante la sequía, los manatíes pueden ser atrapados en cuerpos de aguas profundas. En Venezuela los manatíes comparten hábitats con las nutrias gigantes de río (Pteronura brasiliensis) y nutrias de río (Lutra longicaudis), los delfines de ríos (Inia geoffrensis) y el caimán (Cayman crocodilus) entre otros.
En México comparten hábitats con las tortugas verdes (Chelonia mydas), cocodrilos (Crocodilus acutus), delfines (Tursiops truncatus) y tiburones (Gicglymostoma cirratum). Las rémoras (Eheneis neucrotoides), se encuentran comúnmente adheridas a los cuerpos de los manatíes.

En Panamá están restringidos a dos áreas principales: La Provincia de Bocas del Toro (específicamente las áreas de Changuinola y Chiriquí Grande), y en el sistema del Canal de Panamá, (incluyendo el Lago Gatún y los ríos asociados). Además en ocasiones se les ve en Veraguas y Colón, en Río San San y más específicamente en La Laguna La Olla. La alta proporción de crías observadas (15.7%), la gran mayoría en el Río San San, indica que la reproducción está tomando lugar en el área (Mou Sue et al. 1990).
A su vez en el área de Changuinola, los manatíes se encuentran en tres sitios principalmente: (a) Río San San, especialmente en su tramo inferior, lejos de las poblaciones humanas y del tráfico de embarcaciones; (b) Las Lagunas de Changuinola; (c) La Ensenada de Soropta, con praderas marinas y protección de arrecifes de corales
En el área del Lago Gatún y del Canal de Panamá, se encuentran pequeños números de manatíes, a raíz, al menos en parte, de un proyecto de reubicación en los primeros años de la década de los 60 (MacLaren 1967).

Los manatíes en Puerto Rico habitan cerca de la costa y en áreas estuarias. Los conteos más altos ocurren al este y al sur de las costas de la isla. Estas áreas contienen extensas praderas de hierbas marinas, aguas relativamente calmadas y fuentes de agua fresca provenientes principalmente de ríos. Las praderas de Thallassia testudinum han sido identificadas como la principal fuente de alimento de estos mamíferos en Puerto Rico.


AMENAZAS

Estos animales, con población muy reducida atualmente y con hábitats muy específicos, en Panamá y en otros lugares donde habita se le relaciona con los animales denominados ´comida de monte´, ya que han sido utilizados por las personas para alimentarse a pesar de los problemas de reproducción que tienen.

Actualmente hay otros problemas también como son el intenso desarrollo en las zonas costeras o los vehículos acuáticos. El que los manatíes no naden muy rápido debido a su peso y tamaño los hace vulnerables ante la dificultad de esquivar con rapidez una embarcación a gran velocidad, por lo que son atropellados, ya que las personas tampoco alcanzan a verlos a tiempo en muchas ocasiones.

La destrucción de hábitats representa otro problema. Las plantas marinas en los estuarios y otras zonas se ven afectadas por la contaminación proveniente de las escorrentías desde tierras altas. Además, todo objeto o edificación sobre el agua que cree sombra e interfiera con la captación de luz solar necesaria para el proceso de fotosíntesis de las plantas marinas también afectan estos ecosistemas.

Las redes de pesca también ocasionan la muerte del manatí, pues algunos pescadores continúan atrapándolo para consumir o vender su carne ilegalmente. En otras ocasiones las redes lo mantienen atrapado bajo el agua y muere ahogado.

En Colombia el factor principal de amenaza es la cacería ilegal, ya que la especie ha sido sometida a una intensa cacería desde hace varios siglos y, a pesar de la protección legal, la mortalidad por esta presión sigue siendo preocupante. En los ríos Sinú, Magdalena y San Jorge, los manatíes representan una de las especies de fauna silvestre cuya caza ocasional tiene frecuencia (Millán 1996). Son perseguidos por pescadores especialistas.

Además se puede dar el caso, como ocurre en Bolívar y en las ciénagas de Santander, de que los animales queden atrapados en ciénagas que se secan con fines de riego. En regiones de la Orinoquia se presentan casos de mortalidad en mallas, especialmente de crías y juveniles (Castelblanco et al. 2001).


MEDIDAS DE CONSERVACIÓN

Estos animales no tienen muchos depredadores en su hábitat natural debido a su gran tamaño. Aun así, son de los mamíferos marinos más amenazados. Esto además significa que las personas constituyen la mayor amenaza para estos animales. Los manatíes son animales lentos y no agresivos, lo cual los hace presa fácil de los cazadores. Además son tentadores ya que sus cuerpos proporcionan gran cantidad de carne, de manera que un solo animal puede alimentar a una familia por largo tiempo.

Debido a que están amenazados, es necesario aumentar su número en libertad y proteger sus hábitats.

Un problema añadido intrínseco de la especie es que se reproducen lentamente como ya se ha mencionado en el apartado de CARACTERÍSTICAS. Esto supone que el número de muertes naturales y ocasionadas por el hombre es mayor que el número de nacimientos.

Los manatíes figuran en el Apéndice I del CITES y en consecuencia, el comercio de cualquier producto derivado del manatí está prohibido.

Además el Anexo II del Protocolo de SPAW, incluye todas las especies Sirenia como requiriendo protección total bajo el artículo 11, el cual prohibe capturar, poseer, matar y comercializar las especies, partes o productos de las mismas.

Además otros convenios internacionales pertinentes sirven para proteger los manatíes y sus hábitats. Por ejemplo, la Convención Ramsar para la conservación de los humedales, que entró en vigencia en 1975, promueve la designación y gestión de los humedales nacionales como importantes hábitats para las especies, en particular para las aves acuáticas. Once Estados del Gran Caribe son Partes de la Convención Ramsar. El Convenio recientemente adoptado, sobre la Diversidad Biológica tiene como sus objetivos la conservación de la biodiversidad y el uso sustentable de sus componentes. El Convenio entró en vigencia en 1993 y ha sido suscrito por veinticinco Estados del Gran Caribe y diez de los Estados donde existe el manatí han ratificado.

En Panamá, La ley Decreto no. 23 de 1967 para la vida silvestre, extiende protección a los manatíes y prohibe su caza, y la de otras especies; resolución no. -DIR-002-80 de 1980 del Ministerio de Desarrollo Agropecuario (Dirección Nacional de Recursos Naturales Renovables RENARE) que declara el manatí como especie en peligro de extinción. Sin embargo esta legislación no es efectiva y necesita revisión. La pesca con redes agalleras, está prohibida en los ríos.

Al sur de Puerto Rico, en Bahía de Jobos, hay una significativa población de manatíes. Esta zona se encuentra en gran parte en la Reserva Nacional de Investigación Estuarina de Bahía de Jobos. Aquí además existe un Plan de Manejo de la Reserva de Bahía de Jobos que limita la velocidad, el paso de motoras acuáticas conocidas como ´jet skies´ y la utilización de redes de pesca.

En Colombia esta especie se encuentra protegida por la Resolución 574 de 1969 (INDERENA) que establece una veda completa de caza. Algunas corporaciones autónomas regionales, entre las que se destacan la CVS (Corporación Autónoma de los Valles del Sinú y San Jorge), la CRA (Corporación Autónoma Regional de Centro de Antioquia), han realizado esfuerzos en conjunto con el Ministerio del Medio Ambiente Vivienda y Desarrollo Territorial y grupos regionales para manejar alrededor de 29 animales que se encuentran cautivos(Millán 1999). Estas y otras corporaciones o entidades regionales como Cormagdalena, Cardique (Corporación Autónoma Regional del Canal del Dique), la CAS (Corporación Autónoma Regional de Santander), la Fundación Amigos del Manatí y la Fundación Omacha han realizado campañas educativas para estimular la conservación de la especie. En la Ciénaga de Paredes (Magdalena), se ha venido desarrollando en conjunto con las comunidades en proceso de control de cacería y monitoreo de la población. Actualmente, el Ministerio del Medio Ambiente y la Fundación Omacha están desarrollando un Plan de Acción para la conservacion de los manatíes en Colombia, con el apoyo de las corporaciones autónomas que tienen esta especie en su área de jurisdicción (Trujillo et al. 2006).

"Mapache de cozumel


imagen de Mapache de Cozumel (Procyon pygmaeus) Animales en Extincion
 

Mapache de Cozumel, isla de Cozumel y huella
Animales en Extincion 22/01/09
El mapache de Cozumel (Procyon pygmaeus) es un animal endémico de México que puede desaparecer para siempre ya que está en serio peligro crítico. Y es que actualmente quedan menos de 250 adultos en México y por tanto, en el mundo entero.

A la hora de catalogar a la especie, además del número de ejemplares se han tenido en cuenta otros factores:

1 La población está disminuyendo debido a la introducción de otras especies en su hábitat

2 Hay menos de 50 adultos en cada subpoblación; hay que tener en cuenta que este es uno de los criterios que utiliza la IUCN para catalogar a una especie como en peligro

3 En el 90 % de las subpoblaciones se calcula que hay entre 16 y 48 individuos, por lo que ni siquiera se aproximarían a tener 50 adultos en cada una de ellas

4 Debido a la frecuencia de huracanes ( en esta parte del Caribe los huracanes se producen cada 8 años como promedio) y a la pequeña población, las fluctuaciones en el número de mapaches son enormes; es decir, disminuyen rápidamente en número, lo que puede llevar a una subpoblación a la extinción si esta ya es muy pequeña de por sí.

5 Además cubren una pequeña área geográfica y tienen pocas localizaciones concretas.


Tal vez uno de los problemas añadidos es que hasta 1996 estaba catalogado como insuficientemente conocido. Como se ha mencionado muchas veces, lo que está claro es que si no se sabe casi nada de una especie, y mucho menos de su estado de conservación, nadie puede hacer nada por protegerla. Cuando las personas conocen que una especie tiene unas necesidades, o está en peligro, puede actuar. Por ello es tan importante que se estudien a las especies, y que las personas que más en contacto viven con ellas las conozcan para que las respeten y cuiden. Y más teniendo en cuenta, en este caso en concreto, que las personas que vivan cerca son afortunadas por que cuentan con un animal único en el mundo... y seguro que muchos no lo saben...


POBLACIÓN

Las estimaciones del tamaño de la población incluyendo a los juveniles hablan de una población de entre 323 y 955 individuos. Si tenemos en cuenta que hay un 59 % de individuos maduros tendremos entre 192 y 567 ejemplares adultos según la IUCN. Pero siguiendo el principio de precaución que rige a la IUCN, finalmente la cifra oficial marca un máximo de 250 adultos... ante la duda, en estos casos mejor no calcular por lo alto.


CARACTERÍSTICAS

Las especies integrantes del género Procyon, que son 7 especies, son los conocidos como mapaches u osos lavadores, nativos de América.

El nombre mapache proviene del náhuatl mapactli, que significa ´que tiene manos´, debido a la capacidad prensil de sus garras delanteras. En inglés recibe el nombre de ´raccoon´, que proviene del algonquino aroughcoune, y que significa ´el que se rasca con las manos´ o ´manos que rascan´.
(El náhuatl es la lengua nativa con mayor número de hablantes en México, con aproximadamente un millón y medio, la mayoría bilingüe con el español).

Estos mapaches han sido poco fotografiados, por lo que no hemos dispuestos de fotos para poner. Así pues, hemos incluido además de una foto del mapache, fotos de su isla y una huella suya.

Son más pequeños que los mapaches boreales, de ahí que en ocasiones se les llame pigmeos como el nombre de su especie indica. El que sean pequeños (pesan entre 3 y 4 kg), puede ser un ejemplo de adaptación a vivir en una isla. Además se diferencian de estos en las manchas, ya que tienen una amplia banda negra en la garganta y la cola de color amarillo dorado. Además tiene dientes más pequeños.

Aunque hay quien piensa que no son una especie a parte y que son introducidos, los estudios genéticos demuestran que son una especie distinta a la de los mapaches boreales.

Los mapaches en general tienen una característica mancha de pelo negro que va desde cada mejilla a cada ojo, lo que es casi exclusivo de este género (sólo compartido con el panda gigante y algunos tipos de hurón) que los hace muy reconocibles, pues parece como si llevaran un antifaz. En ocasiones se sientan sobre sus cuartos traseros (muslos y glúteos), como lo hace el oso.

Además, otra característica que los diferencia es que comparados con la mayoría de los mamíferos carnívoros, son muy diestros con sus zarpas delanteras, que utilizan para agarrar y sostener la comida.

Es de color gris o ante claro en las partes superiores y en las partes inferiores de ante tenue, y hacia el interior de color café claro

Son mapaches principalmente nocturnos, aunque no es raro verlos durante el día.

También son animales solitarios, aunque a veces pueden formar grupos familiares.

Aunque están dentro del orden de los carnívoros, son omnívoros que aunque prefieren alimentarse de cangrejos (50 % de su dieta), también lo hacen de frutas, insectos y pequeños invertebrados. La abundancia de unos u otros alimentos en su dieta varían dependiendo de la estación del año y del lugar, así como de la estación de huracanes.

Los mapaches, con su aspecto gracioso podrían parecer buenos para tener como mascota, pero sin embargo nunca llegan a volverse animales domésticos. Pueden morder, ser desobedientes, y desarrollar obesidad debido a que le falta ejercicio.


HÁBITAT Y ÁREA DE DISTRIBUCIÓN

Esta especie habita únicamente la Isla de Cozumel (de 478 km2 tan solo) de la costa de laPenínsula de Yucatán, México.

Famosa a nivel mundial por sus arrecifes de coral, esta isla tiene la mayor parte del territorio virgen al centro de la isla cubierto por selva y lagunas cenagosas que son el hogar de pequeños mamíferos y aves endémicas que siempre han habitado la isla. Además tiene un Parque Nacional, símbolo de Cozumel y la Reserva Ecológica Punta Sur.

Estos animales prefieren los manglares y zonas arenosas costeras, aunque también se les encuentra en zonas dentro de la selva y en zonas agrícolas. Sin embargo su abundancia varía considerablemente dependiendo del tipo de vegetación. Sus subpoblaciones principales se encuentran en las zonas costeras de la isla, mientras que en la parte central de la isla no hay ninguno, o pocos ejemplares. Habitan también zonas próximas a asentamientos humanos, así como carreteras.


AMENAZAS

Esta especie está especialmente amenazada por los huracanes y por una amplia variedad de amenazas por parte de las personas. Tras los desastres naturales estos mapaches descienden en número, y se recuperarían mejor de no ser por las amenazas provocadas por las personas, por lo que está todo unido. Y es que estamos hablando de que la población puede disminuir en un 60 % tras los grandes huracanes, variando la gravedad de las consecuencias dependiendo de la región y del tipo de vegetación de la isla.

La isla de Cozumel es una isla turística, aunque actualmente todavía está relativamente bien conservada, con cerca del 90% de la isla cubierta por vegetación natural. Pero no nos engañemos, una isla turística acaba deteriorándose rápidamente. Lo que empeora la situación para los mapaches es que el lugar menos frecuentado y modificado por las personas, el interior, también es el menos frecuentado por los mapaches. Estos animales prefieren también la costa.

Además, para hacer más fácil el acceso, se construyen más carreteras que fragmentan la isla, actualmente por lo menos en tres zonas. Provocan un efecto barrera y son una traba a la protección de las especies de la isla. La mayoría de casos de mortalidad desde el 2001 son debidos a la muerte por atropello en las carreteras.

Además las especies invasoras exóticas como la Boa constrictos y los perros y gatos tienen un impacto importante sobre la población pigmea, convirtiéndose además en una fuente de parásitos y enfermedades.
Los mapaches son animales particularmente vulnerables a los patógenos y a las enfermedades introducidas, como son la sarna, la rabia y el moquillo que han llegado a través de los perros. Hay también parásitos, ácaros y trematodos. La reciente aparición de Toxoplasma gondii sugiere que han aumentado mucho el número de gatos que les pueden infectar. También se han encontrado la hepatitis infecciosa canina, el moquillo felino y el virus virus Panleucopenia felina.

La caza y captura de mapaches como mascotas no es actualmente una amenaza importante.

Como se ha mencionado en el primer párrafo, la amenaza natural más importante es la de los huracanes, que causan la drástica disminución de la población, causa lesiones y facilita el brote de enfermedades. Además la frecuencia, la magnitud y la duración de los huracanes en la Cuenca del Caribe están aumentando (CITA), por lo que son un tema de gran preocupación ya que tiene un efecto sinérgico con las perturbaciones antropogénicas.


MEDIDAS DE CONSERVACIÓN

El mapache está protegido legalmente en México, y se encuentra en su lista oficial de especies amenazadas como ´en peligro de extinción´ (SEMARNAT 2002).

Existe además en toda la isla un programa de ordenamiento ecológico (Programa de Ordenamiento Ecológico Local de Cozumel) que trata de determinar el patrón de ocupación de la tierra, reduciendo al mínimo los conflictos y maximizando el consenso entre los interesados. Se ha empezado a aplicar recientemente.

Además existen iniciativas en curso para establecer dos nuevas áreas protegidas en la Isla de Cozumel y para llevar a cabo un control de especies invasoras exóticas. Este programa se ha centrado principalmente en los perros y gatos de zonas urbanas, y es necesario ampliarlo a los perros y gatos callejeros, ratas y ratones y Boa constrictor.

También hay trabajos en curso para el establecimiento de un programa de reproducción en cautiverio.

También hay un programa de educación ambiental que promueve la conservación de la biota endémica de Cozumel.

Por último se ha promovido una iniciativa a largo plazo para el estudio y la conservación de la biota nativa de Cozumel, promovido y sostenido por un equipo multidisciplinar mexicano.